Cómo hacer un lavado nasal eficaz
Las fosas nasales son cavidades muy sensibles revestidas de mucosa y vellosidad que se extienden desde los orificios nasales hasta el punto de paso hacia la faringe. La zona interna de los conductos no debe manipularse porque la piel es tan fina que es fácil provocar heridas. Aún así, en ocasiones sentimos la necesidad de hacer lavados para eliminar restos e impurezas, mejorar la respiración nasal y aliviar la congestión en caso de resfriado o alergia. Pero ¿Cómo debe hacerse un lavado nasal?
Qué usar para hacer un lavado nasal
Hay diferentes formatos de venta en farmacias, de agua de mar y suero salino, como sprays, cuentagotas o ampollas monodosis. Principalmente, existen dos tipos de soluciones: las isotónicas y las hipertónicas.
- Soluciones isotónicas. Tienen una concentración salina semejante a la de nuestro cuerpo (NaCl al 0,9%).
- Soluciones hipertónicas. Son más saladas, con una concentración parecida a la del agua del mar (NaCl al 3’5 % aprox.).
Procedimiento y técnica del lavado nasal en adultos
Lo más importante es realizar los lavados nasales de cada fosa por separado. Primero una y luego otra. Sitúate frente a la pica del lavabo y sigue estos sencillos pasos:
- Coloca la cabeza inclinada en diagonal hacia delante y hacia el lado opuesto del que queremos limpiar.
- Vertimos el líquido suavemente por la fosa nasal.
- La solución debe salir por la fosa nasal contraria y debemos dejarla caer en la pica.
- Si percibimos que el líquido se introduce hacia la garganta o los oídos, debemos modificar rápidamente nuestra postura y provocar su salida por el orificio contrario.
- Una vez finalizado el proceso, debemos tapar la fosa que todavía no hemos limpiado y sonarnos con delicadeza para retirar todo el líquido y acabar de arrastrar las impurezas.
- Realizar el mismo procedimiento con el otro orificio.
Evita los trucos caseros
Algunas personas utilizan mezclas caseras para realizar las limpiezas nasales. Sin embargo, no es una buena idea porque nos podrían dañar e irritar las mucosas. Por este motivo, es importante realizar los lavados nasales con productos específicos para ello.
Utilizar agua de grifo tampoco es aconsejable, puesto que no es isotónica y puede ser perjudicial para la mucosa. Además, puede generar el efecto contrario, provocando un aumento de la sequedad de las fosas y empeorando los síntomas.
La ingesta abundante de líquidos y utilizar un humidificador de aire puede mejorar la sensación de limpieza en las fosas nasales, puesto que mantendrá nuestro cuerpo hidratado y nos puede ayudar a expulsar la mucosidad excesiva.
Un equipo de profesionales está a tu disposición en Farmacia Miquel para ayudarte y resolver todas tus dudas o cualquier problema relacionado con la salud. Tu bienestar es nuestra razón de ser. ¡Visítanos! Estamos cerca de ti.